Cuando las aguas parecían calmarse en el contexto internacional, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump; hace un anuncio de una nueva imposición de aranceles por aproximadamente US$ 200 mil millones a los productos de importaciones chinos. Evidentemente, la respuesta de su contendor en esta batalla comercial no se hizo esperar, ya que horas más tarde se anunciaba una respuesta de US$ 60 mil millones en aranceles; poniendo inicio a una nueva fase de esta guerra comercial. Debido a que recién en estas últimas semanas, la economía peruana ha notado las consecuencias de este complicado contexto; cabe preguntarse cuales serían los efectos del mismo en la economía, tomando en cuenta la situación nacional actual.
Analizando primero la situación actual del país, es evidente que ha existido un cambio en la misma desde que se daban los primeros anuncios de esta guerra comercial; ya que ahora ya no es visible esa mirada optimista en la que se afirmaba que estabamos preparados para hacer frente a este complicado contexto. Si bien los efectos hasta ahora no han sido tan notorios debido al uso de mecanismos como el echar mano a las reservas internacionales para estabilizar el tipo de cambio, la preocupación se centra principalmente en que ese tipo de "salidas" no siempre podrá usarse y es urgente hacer un plan para mitigar los efectos de esta guerra comercial.
Hablando de los efectos que esta guerra comercial ha tenido hasta ahora y las consecuencias futuras en la economía peruana, podemos encontrar como un primer efecto el alza de tipo de cambio; esto debido a que los inversionistas recurren a esta moneda ante este panorama caótico. En segundo lugar se puede visualizar el efecto de esta situación en los precios de los principales productos de exportación que son el oro y el cobre, que han tenido ya un descenso de 12% y 18% en sus precios en lo que va del año; evidentemente esto trae como consecuencia un efecto en nuestra balanza comercial, que ha tenido un descenso de casi tres mil millones de dólares en la proyección de la misma para fin de año.
Otra de las consecuencias que trae preocupado actualmente y mantiene expectante a los analistas, es la caída de los principales activos financieros peruanos pesé al buen desempeño y a la solidez que estos llevaban mostrando, esta caída es consecuencia de una disminución de la confianza de los inversionistas que a su vez esta basada en los actuales precios internacionales de los commodities. Evidentemente todos los efectos señalados se concentran en uno más grande y que es la principal preocupación del gobierno, este es la caída de las principales cuentas fiscales, que a final de cuentas derivan en un efecto directo sobre los peruanos.
Por todo lo anterior señalado, urge la búsqueda de nuevas oportunidades y nuevos mecanismos para mitigar los efectos ya comentados. Entre las salidas que se presentan, se encuentra el aprovechamiento de los términos acordados en los TLC, entre los cuales se encuentra la exportación con arancel cero de productos hacia EEUU y China; esto con el fin de estimular la demanda por nuestros productos ante la caída de los ingresos de estas potencias debido a la disputa arancelaria que mantienen. Para finalizar se puede decir que aún no se tiene una visión clara del futuro de esta disputa comercial, ya que no solo es preocupante el efecto directo que puede tener en nuestra ecoomía, sino también el efecto que puede tener en el comercio internacional y sus principales reglas de juego.
SAÚL PÉREZ GUILLEN
Asistente de Estudios Económicos
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