Para
este 2018 se tiene previsto un crecimiento de 4% del PBI y se tiene
expectativas de tendencias favorables que aliente la estabilidad económica en
los próximos años; pero evidentemente esta situación se debería por lo obtenido
en las principales actividades
productivas, exportadoras y la recaudación de impuestos, entonces es preciso
darse cuenta que no siempre vamos a “vivir” de eso, por lo que hace falta más
atención en el capital humano.
La
forma más idónea de impulsar el capital humano, es a través de la educación en
todos sus niveles, esa misma educación en la que estamos en los últimos
puestos a nivel regional y
mundial, lo que es claro reflejo de nuestra baja competitividad e
innovación, que nos está llevando a seguir dependiendo de las actividades
económicas tradicionales.